La verdad acerca del amor propio
La verdad acerca del amor propio va más allá de aceptarse y quererse todo el tiempo, que en sí es algo que no ocurre siempre, y no es sostenible, ya que nuestras emociones cambian, no siempre nos vamos a sentir de la misma manera y no siempre nos veremos con los mismos ojos y eso está bien, es parte de la naturaleza humana.
Si bien cada vez escuchamos con más énfasis el hecho de aceptarse y amarse tal cual uno es, la verdad es que habrá días en que nos miremos en el espejo y no nos guste algo de nosotros o no nos sintamos cómodos con algo que vemos y eso es algo normal y no tenemos por qué dramatizar de la situación,
a todos nos ocurre, no vamos por la vida con una seguridad indestructible, siempre habrá momentos en donde no nos sintamos tan lindos o tan inteligentes y es parte de ser humanos,
tenemos que entender que nuestras emociones varían y darle paso a las emociones negativas también es una muestra de aceptación y respeto hacia nosotros mismos, también va ligado con el amor propio, querernos con nuestros momentos buenos, pero también con nuestros momentos malos es una muestra clara de dejar fluir lo que en verdad somos.
Habrá días en que te despiertes y sientas que eres un caos,
que todo te sale mal o que nada te queda bien, pero dime eso ¿es tan terrible?, acaso por sentirte así ¿significa que no te quieres?, pues yo creo que no, los humanos estamos conformados por muchas emociones y estímulos a diario, la misma televisión o las redes sociales nos hacen colocarnos estándares muy altos de lo que es la denominada «belleza»
y en base a eso comienzan las comparaciones y la desaprobación que muchas veces llegamos a tener hacia nosotros mismos, y sé que puede resultar muy angustiante sentirte mal a veces contigo mismo, y no gustarte, sentirte inferior quizás a otras personas, pero es porque estas enfocando tu atención a cosas que te provocan esas sensaciones o emociones,
si te enfocaras en lo que realmente quieres para tu vida, en lo importante, dejarías de perder el tiempo comparándote con la vida, el cuerpo, la inteligencia o éxito de otros,
todos somos distintos, y eso es lo maravilloso de la vida, todos podemos hacer un cambio si es eso lo que deseamos, y en vez de estar concentrados en envidiar o querer lo que los otros tienen o como se ven, deberíamos enfocarnos en hacer los cambios apropiados para transformarnos en lo que queremos llegar a ser.
El amor propio no es solo aceptarse tal cual uno es, también significa hacer cambios para sentirnos bien con nosotros mismos.
El amor propio va más allá de la aceptación de lo que somos ahora, es también trabajar por lo que queremos lograr ser en todo sentido el día de mañana, es hacer cambios que nos lleve a sentirnos mejor, a vernos mejor y a percibirnos mejor nosotros mismos,
si quieres por ejemplo sentirte mejor físicamente, entonces tendrás que proponerte metas para que eso ocurra, comenzar a alimentarte de forma saludable y consciente,
hacer deporte, hacer cambio de hábitos y de mentalidad para llegar a lograrlo, si nos aceptáramos y amaramos tal cual somos como se nos ha enseñado por ahí se entendería como el hecho de no hacer ningún cambio para mejorar, quedarte como estas y no esforzarte por hacer nada para tu bienestar, porque de lo contrario sería considerado como una especie de «rechazo» hacia tu propia identidad.
Trabajar por nuestros sueños,
por vernos y sentirnos cada vez mejor es la prueba más fidedigna de lo que es amarse de verdad, superarse a sí mismo en cualquier ámbito que te hayas propuesto es desafiarte constantemente y eso te hace sentir vivo y motivado en la vida para continuar aprendiendo y creciendo, eso no está mal, al contrario, es signo de que quieres mejorar como persona.
Cada persona trabaja y realza su autoestima como mejor le parezca, y eso no debería por que ser criticado ni cuestionado, por ejemplo; si ves a una mujer o un hombre que este trabajando en su físico diariamente para lucir mejor, lo tachan de vanidoso, egocéntrico o superficial,
pero lo que no sabes es que detrás de esa persona que tiene una fachada que a ti te incomoda, existe un trabajo arduo, disciplina, constancia, actitud, quizás tuvo traumas y situaciones difíciles que lo llevaron a motivarse a conseguir un buen estado físico,
y eso le está ayudando a reforzar su autoestima, su amor propio, lo que está haciendo esa persona es trabajar por aquello que quiere, implementando hábitos saludables que lo hacen estar en el lugar que está ahora, que es insuperablemente mejor, que estar sin hacer nada por la vida, o perdiéndola a través de hábitos malos y destructivos, entonces ¿Por qué no alegrarnos por los triunfos de los demás, y dejar de criticar absolutamente todo?
Amarse no es solo querer lo que ves en el espejo, si no también lo que no ven tus ojos
Amarse no es solo amar nuestro cuerpo, claro está que es nuestro templo, aquello que nos hace funcionar cada día y eso deberíamos tenerlo presente, así es que hay que trabajar en él, entrenarlo, alimentarlo bien y cuidarlo, porque ese cuerpo que ves ahí es el que estará contigo al menos por unos buenos años más.
Al igual que el cuerpo, la mente con mayor razón la deberíamos cuidar, pero también aceptar aquello que nos dice y aquello que nos manifiesta a través de las emociones que sentimos cada día, cuando despertamos muchas veces en la mañana y no nos sentimos en nuestro cien por ciento.
muy por el contrario, nos sentimos apenados, angustiados y sin ganas de nada, también es una de las tantas formas que tiene nuestra mente de manifestarse de que algo estamos haciendo mal o que algo deberíamos cambiar en nuestra vida, y lejos de cuestionarnos o criticarnos por cómo nos estamos sintiendo en ese momento,
deberíamos abrirnos a escuchar lo que nuestra mente y cuerpo nos quieren decir,
darnos la oportunidad de sentirnos mal sin colocar resistencia, de vivir ese día con las emociones que estamos experimentando y en base a ello entender por qué se está manifestado esa emoción en nuestra vida,
serán quizás cosas no resueltas en el pasado o cosas que hemos pospuestos y que por miedo no hemos podido hacer o cumplir, son frustraciones que llevamos, o son dolores y traumas no resueltos que no nos hemos hecho cargo de sanar,
cualquiera sea el motivo de sentirte así al día de hoy, no deberías seguir callando esas emociones, por el simple hecho de querer sentirte bien todo el tiempo, o ser eficiente todo el tiempo, las emociones se expresan, se escuchan, se sacan de nuestro interior para poder ir trabajando en ellas y así poder enfrentarnos a aquellas situaciones que nos tienen mal.
Es por eso que está muy bien dejar aflorar tus sentimientos, tus emociones, tus estados negativos,
porque eso te dará pistas de lo que tienes que hacer para cambiar en tu vida, para resolver temas pendientes del pasado y para comenzar a sanar, y eso es parte de aceparte, de amarte, así te demuestras que lo que sientes es importante, dejándolo fluir, escuchándote, no criticando eso que sientes, ni mucho menos ignorándolo.
Lo que no expresas luego se convierte a través de los años en enfermedades, por que tu cuerpo lo somatiza y de alguna manera la emoción explota por algún lado, y muchas veces eso se transforma en una enfermedad grave.
No desestimes tus emociones, porque ellas siempre llegan para decirte algo importante, y por mucho que creas que el sentirte mal es algo que no deberías abrazar y escuchar, es finalmente lo que hará que te muevas desde el sitio que estas ahora y hagas los cambios necesarios para ti, para tu bienestar.
Respetarte es otra de las formas de demostrarte amor
Respetarte como persona y colocar limites sanos hacia los demás es un acto de amor para contigo mismo, no tienes por qué hacer todo lo que los demás quieren que hagas, o postergar tus propios sueños o intereses por lo que los otros opinen o piensen de ti, entender que tu vales como ser humano es ir por la vida avanzando con aquellos valores que tú te has impuesto para tu vida y querer colocarlos como prioridad, pese a lo que la sociedad o el mundo entero espere de ti.
Tenerte como prioridad no es egoísmo, como muchos pueden pensar, es algo que deberías siempre considerar hacer, ya que al fin y al cabo estas en esta vida para hacerte feliz y tener una calidad buena de vida.
La admiración va de la mano del respeto, muchas veces respetamos a ciertas personas por la admiración que sentimos por ellas, sus cualidades, sus actitudes, o lo bueno que transmiten o percibimos de ellos, si somos capaces de admirar a otros, ¿Por qué no también admirarnos a nosotros mismos?, trabajar en nosotros, para sentirnos orgullosos y vernos con ojos de reconocimiento,
lo increíble de la naturaleza humana es que podemos cambiar cuando nosotros lo decidamos, sé que cuesta y a algunos más que otros, ya que muchas personas tienen mayor resistencia al cambio, ya sea por comodidad, por miedo, por pensamientos limitantes, etc., pero independientemente de eso, podemos llegar a crear la mejor versión de nosotros mismos, y para eso hay que realmente querer hacer los cambios y persistir en ello.
Otra de las formas de respetarte y cultivar el amor propio,
es escuchando tus necesidades tanto emocionales como físicas, dejar de estar con personas tóxicas o en situaciones tóxicas que te hagan daño, tomar decisiones que te lleven a un mejor bienestar emocional,
escuchar a tu cuerpo cuando se sienta cansado, por ejemplo, y darle tiempo para que descanse, se recupere, no sobre exigirlo, escuchar lo que está pasando dentro de ti, y empezar a hacer los cambios necesarios para que todo comience a trabajar a tu favor.
Cambiar hábitos destructivos por saludables es otra muestra de amor propio
Por mucho que nos cueste tener y mantener hábitos saludables en nuestra vida, es la demostración más grande de amor propio, ya que buscaremos la forma de sentirnos mejor cada día, aunque sea un poquito, el dormir bien, por ejemplo, no va en la cantidad de horas, porque eso varia en cada persona, si no que en la calidad del sueño, eso hace que tu mente y cuerpo trabaje de mejor manera para alcanzar todo aquello que te has propuesto,
alimentarse bien y en este punto no implica que comas solo verduras y frutas todo el tiempo, involucra que tengas una alimentación balanceada, pero siempre priorizando aquellos alimentos que sabes que te hacen mejor que otros, no es el hecho de restringirte de aquello que te gusta, sino que no comerlo todos los días, porque no se trata de prohibirte de aquello que disfrutas comiendo, sino que saber comerlo, en la cantidad adecuada y no siempre,
eso complementado con una vida activa, haciendo ejercicio, caminando, algún deporte que te guste, tu cuerpo y tu mente funcionarán mucho mejor cada día, y sentirás ganas de vivir, porque estamos diseñados para mantenernos en movimiento, por mucho que te guste estar quieto, nuestro cuerpo está diseñado para moverlo constantemente ya sea de la forma que tu elijas y te guste más,
no por que otros van al gimnasio,
tendrás que hacer lo mismo, si te gusta hazlo, pero si prefieres otro deporte haz lo que a ti te acomode más y lo que te haga sentir mejor, eso tienes que entender, no es obligación que hagas exactamente lo mismo que hace la gran mayoría, hay muchas alternativas y tú puedes escoger la que más te funcione a ti y por supuesto la que más te guste,
pero mantente en movimiento, en el horario que lo hagas no es lo realmente importante, cuando tú tengas un poco de tiempo hazlo, pero todos los días, no te impongas un horario, si dentro del día tienes muchas cosas que hacer, eso solo te causará estrés, el ejercicio es saludable en cualquier hora del día, lo importante es hacerlo.
Todo hábito bueno cuesta mucho implementarlo en un principio, pero a través de los días, ya se vuelve parte de ti, te acostumbras, eso te ayudará no solo para tu cuerpo, sino también para tu mente, te hará sentir más confianza en ti mismo, te hará sentir capaz de lograr lo que sea, te dará vida.
y si decaes un día, no quiere decir que seas un fracaso, al otro día continuas nuevamente, sin críticas, sin darle vueltas tanto al asunto,
amarte, aceptarte, al fin y al cabo, es ir a tu ritmo sin competir con otros, solo compitiendo contigo, para ser cada día mejor que el día anterior (y eso aplica en todos los ámbitos de la vida), es comprendiendo tus caídas, pero luego continuar entregando todo de ti para tu bienestar personal.
Recuerda: sentirte mal, no está mal, es también parte del proceso de quererse, respetarse, y aceptarse.
Querer hacer cambios que contribuyan a un mejor bienestar para ti, habla del amor que te tienes.
Sentirse bien con uno mismo todo el tiempo es algo irracional
Abrázate con tus momentos buenos, pero con mayor razón con tus momentos malos, deja de criticarte por todo, solo fluye y trabaja en ti cada día para llegar a ser esa persona que tanto anhelas ser, cuida de ti, de tu cuerpo, de tu mente, y de los malos hábitos que eso solo te destruirán, comienza a valorarte y colocarte como prioridad, eres todo lo que tienes en esta vida y depende de ti hacerte muy pero muy feliz, así comenzarás a cultivar el amor propio en tu vida.
Hasta la próxima mis queridos lectores 😀